lunes, 17 de diciembre de 2012

SILVIO Y EL FÚTBOL

Artículo original publicado para el blog de nuestros compadres "Amigos de Colusso vs Amigos de Kukleta" que tengo a bien publicar aquí también. Grazie a Rinat Rafaé por su ayuda y por las fotos, este hombre es una enciclopedia musical. Ale pues les dejo con el artículo, pero antes les recomiendo visitar la entrada originaria que tiene fantasy comentarios y así de paso darle una vuelta a ese peaso de blog en el siguiente enlace: http://colussoscontrakukletas.blogspot.com.es/2012/12/silvio-y-el-futbol.html

¿Qué voy a contar yo de Silvio que no se haya contado ya? Casi ná, la verdad, aunque gracias a la oportunidad que me brinda esta página voy a intentar profundizar un poco en la tercera pata de los amores, que eran uno y trino, del mito del rock sevillano, a saber Rock’n’roll, Semana Santa… y el fútbol (¡por supuesto!). Y es que Silvio era muy futbolero, eso lo sabemos todos, y muy sevillista, y a pesar de ello cantó el mejor himno que jamás le hayan hecho al Betis, pero como Silvio era especial, y eso tanto los béticos como los sevillistas lo sabemos, pues era un tío que nos caía bien a todos y lo mismo en el aniversario de su muerte se escucha el “Betis” en el Villamarín, que en el descanso suena “Tri tri tristeza” en el Pizjuán. Silvio está por encima de esa rivalidad.

No es que sea un biógrafo oficial, ni que tenga acceso a material clasificado, ni siquiera tuve la oportunidad de conocerlo personalmente, por lo que no podré aportar nada nuevo pero si ordenar a modo de recopilación montones de entrevistas y referencias que se han hecho reuniendo lo silviano con lo futbolero, por lo que sobra decir que este texto está abierto a cualquier aportación, conocimiento o experiencia que ustedes hayan podido tener acerca del tema que hoy nos acontece, aportaciones que sin duda agradeceremos todos y ayudaran a completarlo.

Cuando era un crio y todavía no había escuchado a Elvis por la radio, Silvio era un enamorado de la Semana Santa, pero también del fútbol y eran frecuentes sus escapadas a los campos de fútbol del Arenal, por eso no es raro que en una ocasión Silvio declarara que “Para ser músico primero hay que saber jugar al fútbol y no debía hacerlo nada mal, por lo menos en sus años mozos, medio en broma medio en serio alguna vez contaba que si no jugó en el Sevilla es porque estaba muy canijo, pero que su sueño era haber pisado el césped del Sánchez Pizjuán y anotar un gol mirando al norte: ”No me fichó el Sevilla F.C., verdadero representante de la escuela (sevillana), por falta de peso. Es más, cuando estoy en el escenario actuando me siento el delantero centro del Sevilla F.C., y cuando estoy en las gradas del Sáchez-Pizjuán me siento un rockero". Como todo chavalito tenía sus ídolos, y es de la opinión de que el mejor jugador que él vio sobre la hierba fue Juanito Arza, pero  también le encantaba Pereda, tanto que lo nombraba siempre que cantaba aquello de "Vengo buscando pelea" y acaba cantando “¡Vengo buscando a Pereda!". De los entrenadores el que más le gustaba era Manolo Cardo al que catalogaba como “mejor entrenador de los últimos tiempos” y al que también inmortalizó en la canción "Tri tri tristeza" con ese mítico ¡Manolo Cardo! Que canta justo antes de decir "Escuela Sevillana" (canción muy sevillista por cierto, porque también se escucha “ay Sevilla Club de Fútbol nada más” entre los versos) y es que la Escuela Sevillana era otra de sus debilidades o como él mismo afirmaba que lo mejor que ha dado el fútbol en España ha salido de la escuela sevillana “Nada de patadas ni de fuerza física, lo nuestro es la elegancia, suavidad e inteligencia”. De los jugadores más reciente destacó en alguna ocasión a Polster, Zamorano, Suker o Dassaev. Momento absolutamente surrealista es el que se vivió en una entrevista previa a un concierto en 1988 donde a la pregunta del entrevistador Silvio contesta raro y el compi que está al lado le explica que debe de ser ruso porque como es tan sevillista y el Sevilla tiene un portero ruso… No era raro tampoco antes de los conciertos encontrarlo con el transistor muy concentrado, como en aquella ocasión en la que le preguntaron si iba a salir al escenario y Silvio se volvió, miró fijamente a su interlocutor y le contestó “1-0 ganamos” o la famosa leyenda que decía que cuando se sentía deprimido se acercaba al estadio Sánchez Pizjuán, frente al mosaico del escudo del Sevilla F.C. y allí meditaba y meditaba mientras el taxista debía alumbrar el escudo con sus faros por petición suya. No tiene desperdicio cuando el entrevistador de la anterior interviú que comentábamos se lo pregunta y Silvio le respondeme lo han preguntado tantas veces que además es verdad”. Lo que seguro que es verdad, y así quedó registrado es como Silvio bailaba en el mosaico para grabar el videoclip de Rezaré. Todas estas cosas lo han hecho inolvidable por Nervión, contando incluso con su propio “Frente Silvio

Pero a pesar de ser tan sevillista Silvio tenía también una simpatía muy grande por el Betis, porque como el mismo decía primero era sevillano y luego era sevillista, de hecho toda su banda durante la época de Sacramento (y última de Barra Libre) era bética y como hemos comentado le cantó al Betis como nadie. Al ser preguntado sobre esto Silvio contestó lo siguiente “- ¿Eres del Sevilla o del Betis? - Soy sevillista. Me siento afortunado con ser sevillista, pero te digo una cosa, me gustan el Betis y los béticos, porque soy sevillano antes que sevillista. La verdad es que también soy bético; - ¿También? –Además” Pues eso, que además de sevillista era bético.

Sobre la canción de Betis hay mucha leyenda, que si perdió una apuesta con sus músicos y tuvo que cantarle al Betis, que si nunca cantaba la palabra “Betis” entera si no que cantaba “eeetis” (esto parece que sus propios músicos lo confirmaron) lo cierto es que como bien nos cuentan aquí (y a riesgo de resultar un destripa leyendas) la canción venía a ser una versión de Elvis que de repente pasó a ser California y de ahí no se sabe muy bien como pasó a “Betis” con su referencia a la Real de Sociedad (más de uno llegó a creerse que el equipo realmente se llamaba Real DE  Sociedad) y al “verde césped del Sánchez Pizjuán” incluidas. Pero al final la leyenda es lo de menos, lo que queda es que Silvio y Sacramento se marcaron un temazo pegadizo como pocos (incluso la eligieron en el 11 ideal de canciones dedicadas al fútbol) y que se convirtió en un himno oficioso bético, motivo por el cual invitaron a los artistas al Día Mundial del Beticismo en el que Silvio con la guasa que le caracterizaba la lió y cuando salió al escenario a cantar la canción de Betis se vino arriba y empezó a gritar A segunda!, ¡a tercera!" lo que le valió una bronca y una multa del manager y batería de la banda el Pive Amador. Seguro que los béticos comprendieron rápidamente la ironía que se gastaba el rockero y le perdonaron al momento.

En fin, Silvio. Un tío al que le gustaba el fútbol  una jartá porque significaba “la posibilidad que tiene el hombre de ser nacionalista, de tener un escudo y una bandera sin meterse en política… y será muy importante mientras las política no desaparezca” y que no solo le gustaba el de aquí, que también tenía sus propios gustos: “Después soy de Las Palmas de Gran Canaria, después del Cádiz. A mí por ejemplo no me gusta la escuela norteña. Inglaterra y Escocia no me gustan. Aunque peque un poquillo de duro me gusta el fútbol italiano, aunque sea demasiado defensivo. Me gusta el fútbol sureño, me gusta el fútbol que tiene imaginación, que le da un poquito de arte, que no dependa todo de la velocidad y que haya algo de tocino… el que tiene que correr es el balón

Ahora que eso de practicar él el deporte era otra cosa, aunque alguna vez que otra confesó que le daba “por hacer gimnasia sueca… dos o tres minutillos… o dos.”

Pues esto es todo a lo que he llegado a contarles. Agradecerle a los amigos de este blog esta invitación y recordad avanti con la guaracha, porque de cierta manera el roll es la madre no solamente del rock si no de la guaracha, y que donde hay ambiente y alegría, amigos míos, de cierta manera hay un poco se swing. Podéis ir en paz.

4 comentarios:

  1. Lo de la canción Betis me da a mí la impresión de que fue la gente que asistía a los conciertos la que se inventó la asociación con lo futbolístico. En la original de Elvis se oye alguna vez "pretty" aunque no en el estribillo, que ni siquiera tiene. A Silvio se le debió quedar esa palabra junto con "California" y le debió gustar eso de estribillearla con sus compañeros coreándola. El público (cierto sector) debió ser quien convirtió ese estribillo en Betis y Pive aprovechó e hizo la letra que todos conocemos. Silvio no decía "eeeti" porque le diera asquito decir Betis, que ha quedado claro que no se lo daba; simplemente decía lo que había dicho siempre. Cuando la canción era ya "Betis" con su letra y la hacían en directo había también parte del público (la otra) que aprovechaba el estribillo para gritar "a segunda", aquel día mundial del beticismo debió ser el único en que nadie lo decía, por motivos obvios; tan raro le resultaría a nuestro rockero ese "vacío" que no se le ocurrió mejor cosa que cantarlo él.
    Yo me inclino más por que la verdad es esta, aunque internet está plagado de artículos de cortaypega que hablan de apuestas perdidas y de que Silvio no quería pronunciar la palabra Betis.

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  2. Me he enterado algo de que en Granada le han puesto una calle a Silvio, pero solo he encontrado esta mención ... ¿se sabe algo de esto?

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  3. Que fatiguita me da ver a Silvio metido dentro del bacalao ese, y eso que a Silvio el bacalao le gustaba tela...

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  4. Oye,por curiosidad, alguien sabe algo de Silvio y su afición por las artes marciales?lo he leído y me ha llamado la atención.

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